Las comisiones bancarias
Cuando a cualquier persona le preguntas cómo gana dinero un banco, te responderá que concediendo préstamos, invirtiendo en valores…eso es cierto, pero muchos no saben que la mayor fuente de ganancias de las entidades bancarias son las comisiones. Puede decirse, que los bancos y cajas cobran comisiones por absolutamente todo.
Las comisiones son establecidas por cada entidad, consultando al Banco de España que velará por que reúnan una serie de requisitos y cumplan con la legalidad.
Deben ser necesarias, es decir, que respondan a un servicio prestado y no recogido en otro producto contratado por el cliente, han de ser comunicadas a los clientes, y publicadas en los tablones de anuncios de las oficinas, no pueden ser abusivas (sobre esto habría que discutir mucho), no pueden cobrarse por operaciones realizadas por fallos o negligencias de la entidad, no pueden cobrarse si no aparecen en los contratos y no pueden exceder unas cuantías fijadas (por ejemplo, el 1% en la cancelación de hipotecas a tipo variable).
Comisiones bancarias que más se aplican
Las comisiones que se aplican normalmente son: por transferir dinero, por mantener las cuentas, por sacar dinero de los cajeros, por tener tarjetas, por estudiar y/o crear un crédito, por cancelarlo, por tener un descubierto en cuenta…
Realmente, es difícil escapar de ellas. La única cosa que podemos hacer, es comparar entre las diferentes entidades y buscar las comisiones más bajas, porque aunque en la teoría las comisiones han de tener el grado de negociables, los consumidores a menudo no nos encontramos en una posición fuerte frente a la entidad.
Si necesitas un crédito y el Banco X te lo concede, seguramente no podrás ponerte a exigir que te quiten esa o aquella comisión. En España parece que los clientes de los bancos tienden a ser bastante tolerantes y poco combativos a la hora de aceptar los pagos que nos imponen. En otro artículo hablaremos de cómo podemos tener más eficacia a la hora de negociar alguna comisión bancaria.
Gasto medio anual de una persona en comisiones bancarias
Según un estudio de la revista Consumer, el gasto anual de una persona en comisiones puede variar entre 40 y 210 euros, en una situación normal como es la de tener una cuenta corriente, una tarjeta de crédito, una de débito, hacer una media de seis transferencias, y algún ingreso de cheques.
Además, como pida un crédito deberá pasar por caja y abonar las pertinentes comisiones de estudio y apertura…y que no se le ocurra adelantar algo de la deuda, porque entonces pagará también la comisión de cancelación anticipada parcial o total (ver artículo sobre amortizaciones de hipoteca). Y si encontramos un banco que nos preste el dinero algo más barato, llevarnos la hipoteca allí nos conllevará pagar la comisión de subrogación pertinente.
Entidades que no cobran comisiones bancarias
Últimamente vemos en los medios de comunicación muchos anuncios de entidades que dicen no cobrar comisiones. Agradecemos el esfuerzo, pero no por ello dejamos de decir que en realidad, todo esto tiene peros y letra pequeña.
Hay una serie de comisiones (como las de mantenimiento de cuentas) que no se cobran a clientes solventes o a accionistas, pero otras siguen cobrándose (como las de apertura de hipotecas).
Otras entidades condicionan el no cobrarte una serie amplia de comisiones a que te fidelices con ellos (nómina, seguros, hipotecas, cuentas, tarjetas, plan de pensiones...). Así recuperan con creces lo que dejan de ingresar.
Si hemos dicho al principio que las comisiones en su conjunto son la principal fuente de ganancias de las entidades, lógicamente no van a eliminarlas por completo nunca. Sólo eliminan las comisiones no financieras (mantenimiento de cuentas, transferencias hasta una cantidad, emisión y renovación de tarjetas). Son negocios. Y ningún negocio sacrifica a su gallina de los huevos de oro. Como mucho, deja que de cada 50 huevos de oro ponga uno normal.